La Organización Mundial de Aduanas (OMA) diseñó la Nomenclatura del Sistema Armonizado con el objetivo de codificar todo el universo de mercaderías y así poder armonizar los regímenes aduaneros y los procedimientos comerciales. La misma se encuentra dividida en Secciones, Capítulos, Partidas y Subpartidas, y es de aplicación internacional.

A cada producto en particular le corresponderá una única codificación. La clasificación es el proceso por el cual obtendremos la posición arancelaria de nuestra mercadería.

La clasificación es una de las primeras tareas a realizar antes de emprender el negocio, ya que a partir de la posición arancelaria conoceremos el procedimiento aduanero y tributario de aplicación.

Es decir, conoceremos cuáles son los tributos que pagaremos, los estímulos que percibiremos, el trámite de licencias que llevará nuestra solicitud de importación, las intervenciones de terceros organismos que se deberán tramitar, las prohibiciones que pudieran afectarnos, y la estrategia aduanera que mejor se ajuste a nuestro proyecto, entre otras cuestiones fundamentales.